En primer renglón debemos destacar que la fatiga ocular puede significar cosas diferentes entre las personas y que si bien, no es grave, debe atenderse pues, claramente, es un llamado a detenerse a descansar pero también puede significar el síntoma de alguna enfermedad o de que tus lentes necesitan una graduación diferente.
Los síntomas, de manera general, se relacionan con ojos llorosos y cansados; ardor y picazón; fatiga muscular facial como resultado del esfuerzo al tratar de enfocar mejor; ojos secos e irritados; visión borrosa o doble; dolor de cabeza y en cuello, hombros o espalda; sensibilidad a la luz y no poder mantener los ojos abiertos; dificultad para lograr concentración.
La fatiga ocular es común en toda época del año, pero en especial antes de las vacaciones. Es el cansancio acumulado o el uso frecuente o eventual pero intenso de pantallas de los dispositivos digitales o el conducir largas distancias sin descanso, lo cual es sumamente peligroso para quienes transitan esa vía por el riesgo de los microsueños o de alguna molestia que desconcentre al conductor.
También están en la lista el leer sin hacer pausas o con poca iluminación y exponerse a la luz brillante o al resplandor. Asimismo, el estrés influye de manera importante. El ambiente hace su parte, por ejemplo, el ventilador, el aire acondicionado o los sistemas de calefacción pueden causar resequedad.
Pero también puede ser un síntoma de alguna patología, como síndrome del ojo seco o visión no corregida, es decir un error refractivo.
Pongamos el zoom en los dispositivos, pues en estos tiempos en que el mundo de la productividad y la educación tienen a la tecnología como oficina y aula, y el mundo social como ágora, se convirtió en la causa más común que hace posible la fatiga visual.
De acuerdo a la American Academy of Ophthalmology se le denomina como síndrome visual informático. Se presenta cuando los ojos pasan más de dos horas seguidas frente a las pantallas. Aunque también sucede con el material impreso, la fatiga llega más prontamente ante la luz del dispositivo.
Esto obedece a que se parpadea menos y por lo tanto la humectación es escaza para el globo ocular, es común que las pantallas estén ubicadas en ángulos inadecuados para la vista; exceso de brillo o poco contraste, la mala postura, sequedad del ambiente y hasta la falta de orden cerca al computador inciden; pero también las patologías existentes pueden hacer que los ojos se cansen más rápidamente.
Estos asuntos pueden pasar desapercibidos, pero afectan tu calidad de vida, tu productividad y tu salud. Por lo tanto, recomendamos:
La visita al oftalmólogo es insustituible. Se pueden encontrar algunos consejos en las redes pero se debe tener cuidado con lo que aplicas en tus ojos, en algunos casos, y también te aseguras que los consejos que se te proporcionen estarán en sintonía con tus necesidades de salud. Es así como hacemos énfasis en la consulta para:
Escucha a tu cuerpo, tiene algo por decirte con cada síntoma. En Oftalmoservicios estamos comprometidos con la salud de tus ojos y con tu calidad de vida.